Fantaciencia
Autores: Mauro Mantella (guión) y Leandro Rizzo (dibujos)
Edita: Ovni press, Lomas del Mirador, 2008
Bizancio: Punta Baja
Autores: Mauro Mantella (guión) y Sergio Montes (dibujo)
Edita: Ovni press, Lomas del Mirador, 2009
El Hombre Primordial
Autores: Mauro Mantell (guión) y Germán Erramuspe (dibujo)
Edita: Rabdomantes, Rosario, 2017
Ucrónicas
Autores: Mauro Mantella (guión) y varios autores (dibujo)
Edita: Rabdomantes, Rosario, 2017
Probablemente, de todos los guionistas argentinos surgidos en los últimos 20 años, Mauro Mantella sea probablemente le mas deudor del estilo que los autores británicos (via su desembarco en USA y luego en el resto del mundo a partir del os ochentas) han convertido en marca de fábrica. Su relación con el fantástico, su prosa literaria y que juega con conceptos filosóficos, su intento de replantear continuamente las posibilidades del medio, su cuidado ante los engranajes del argumento, todo lo hermana con Moore, Morrison, Gaiman y compañía.
Esto no esta dicho como algo que le quite mérito a su tarea. Por el contrario, escribir al nivel de estos autores no es algo fácil. Y Mauro me parece poder mirar cara a cara a muchos guionistas de esa camada y no avergonzarse. Lo puedo demostrar justamente tras releer cuatro de sus libros.
Empecemos con Fantaciencia, una historia donde, lo que empieza como las aventuras de un equipo de investigadores de lo desconocido (al estilo Cuatro Fantásticos) termina convirtiéndose en una pregunta sobre la realidad, el entretenimiento pop y las formas de enmascarar la desigualdad social. Todo engarzado con esos mecanismos de relojería recontra solido, derrochando ideas para al menos un año de serie regular en apenas 64 páginas. Que encima dibuja como los dioses Leandro Rizzo. Simplemente es una injusticia que esto no tuviera continuidad.
La otra gran historia donde Mantella brilla como guionista es El Hombre Primordial, que saliera publicada primero en la revista Bastión y recopilada por Rabdomantes. Subiendo la apuesta del Miracleman de Moore, acá el superhéroe no es como un dios. Es Dios. O al menos su sucesor. Lo que empieza con la historia mas o menos esperable de un loser (aquí un pibe con síndrome de Down, huérfano y portador de HIV) adquiriendo poderes inimaginables rápidamente se convierte en una pugna por el poder de la creación y su destino. Si, pavada de ambición. Pero que Mantella se re banca construyendo personajes interesantes y tridimensionales que hacen lo que hacen por lógica. Y todo sostenido por el dibujo de German Erramuspe, de un hiperrealismo fastuoso y algo barroco, que le queda como anillo al dedo a esta historieta. No por nada quienes la leyeron en su momento la seguían recordando.
Si quieren, pongamos un escalón más abajo en la calidad a Bizancio: Punta Baja. Bizancio es un detective de lo oculto, una especie de versión criolla de John Constantine, con las mismas ambigüedades grises, la misma actitud desencantada y la misma capacidad para encontrar lo sobrenatural en los lugares más impensados. Como en Punta Baja , un pueblito de la provincia de Buenos Aires en los que queda varado por casualidad para encontrarse en una historia de secretos compartidos y posesiones demoníacas que debe resolver. Todo eso mientras su vida personal tampoco marcha demasiado. Muy solido, muy creible, bien podría haber sido un arco de Hellblazer… y tal vez por eso mismo lo pongo un poco más abajo. NO hay mucho que diferencie a Bizancio de Constantine. Y reconozco que los dibujos atmosféricos de Sergio Montes, sin ser malos ni mucho menos, empalidecen un poco frente a los de los autores anteriores.
Me dejo para el final Ucrónicas, una antología de historias cortas que Mantella hizo con varios dibujantes. El propio Mantella me reconoció charlando que no le gusta tnaot escribir relatos cortos. Y por supuesto la calidad, como en todas antología, varía, aunque el promedio es muy bueno. Ningun relato es malo y ningún dibujante es inmirable, reconozcámoslo. Pero algunos están mejor elaborados que otros. Yo me quedo con Amor negro, una viñeta sobre zombies con un giro de mucha mala leche, dibujado por Alejandro Aragon; Fusion, una explicación de por que el Nirvana no es tan bueno como se cree, dibujada por Salvador Sanz como los dioses; la bizarrisima el Lado B, con una idea sorprendente llevada hasta la lógica ifnal y con dibujos de Mauro Lirussi, que además dibuja en un registro totalmente diferente El Cielo de los perritos, una historia durísima y con Zombiesbena dibujada por Facunod Percio y que explica las diferencias de percepción entre el zombie y el humano de una manera fabulosa. Las demás igual tienen un giro, una idea, un elemento que trata de escaparse de lo obvio. Pero reconozco que el trabajo breve de mantella me resulta menos interesante que sus obras largas.
Pero en el balance, Mauro Mantella es un guionista fantástico que ojalá se prodigara más. Yo , al menos , sería un lector fiel.